La cultura y el espíritu marista iluminaron ENCUMAR 2025.

Con los corazones llenos de cultura, amistad y sentido de comunidad, concluyó el Encuentro Cultural Marista ENCUMAR 2025, celebrado del 8 al 11 de abril en la Universidad Marista de Querétaro. Una fiesta de talento, creatividad y valores maristas que reunió a más de 300 jóvenes provenientes de seis universidades hermanas de todo el país.

Desde el primer momento, el campus se llenó de sonrisas, abrazos y entusiasmo. Las delegaciones de Ciudad de México, Guadalajara, Mérida, Valladolid, San Luis Potosí y la anfitriona, Querétaro, hicieron patente que el carisma marista trasciende fronteras, lenguajes y disciplinas.

El encuentro arrancó con una emotiva ceremonia de inauguración en la que la música, las danzas y los mensajes de bienvenida recordaron el llamado de San Marcelino Champagnat: "Para educar hay que amar." La presencia de autoridades académicas y gubernamentales, la participación solemne de la Banda de Guerra del Ejército Mexicano, y los emotivos discursos, sellaron el compromiso de seguir formando jóvenes creativos, críticos y comprometidos con su entorno.

A lo largo de los días, el arte cobró vida en cada rincón del campus: concursos de canto, dibujo, pintura, ajedrez, debate, fotografía y cortometraje permitieron a los jóvenes mostrar sus talentos y construir puentes a través de la expresión artística. Los talleres de danza aérea, lengua de señas mexicana, serigrafía, ritmos latinos y elaboración de muñecas Lelé, se convirtieron en espacios de aprendizaje compartido, creatividad y solidaridad.

Cada actividad, cada nota musical, cada palabra dicha en los debates, resonó con el espíritu marista que impulsa a transformar el mundo a través del amor y el servicio. Como lo recuerda una frase de nuestro fundador: "Denme un niño y yo les devolveré un hombre." En ENCUMAR, esa transformación se pudo ver en cada gesto de fraternidad, en cada esfuerzo colectivo y en cada sonrisa encendida.

El encuentro cerró con una ceremonia de clausura en la que se entregaron reconocimientos a los ganadores de los concursos y, sobre todo, al carisma vivido intensamente en estos días. Con gran emoción, se realizó la entrega simbólica de la estafeta a la Universidad Marista de la Ciudad de México, próxima sede de ENCUMAR 2026.

Hoy, más que nunca, sabemos que el arte, la cultura y los valores maristas son caminos que nos unen, nos fortalecen y nos llaman a seguir sembrando esperanza en el corazón del mundo.

¡Hasta pronto, familia marista! Nos vemos en el próximo encuentro.